En este día empieza el tiempo de la Cuaresma. El papa Francisco en su mensaje para la Cuaresma invita a recorrer el camino cuaresmal, «que nos conducirá a las celebraciones pascuales, recordemos a Aquel que «se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz» (Flp 2,8)». Es la oportunidad que nos ofrece Dios y la Iglesia de volver a empezar poniendo en práctica la fe, la esperanza y la caridad que dan sentido a las prácticas cuaresmales, como dice el Papa:

«El ayuno, la oración y la limosna, tal como los presenta Jesús en su predicación (cf. Mt 6,1-18), son las condiciones y la expresión de nuestra conversión. La vía de la pobreza y de la privación (el ayuno), la mirada y los gestos de amor hacia el hombre herido (la limosna) y el diálogo filial con el Padre (la oración) nos permiten encarnar una fe sincera, una esperanza viva y una caridad operante».